El Espliego (Lavandula angustifolia) procede originariamente de la región mediterránea.
Esta planta posee preciosas espigas moradas que desprenden una dulce fragancia.
Hay unas 25 variedades diferentes de espliego.
Sitúa cerca de la terraza o en macetas al lado de su juego de mesa y sillas para disfrutar cada día de su aroma.
Cuanto más soleado sea el lugar de emplazamiento, más intenso se volverá el color de las flores.
En un lugar demasiado oscuro o cuando se aplica demasiado abono, la planta se vuelve lacia. Ante todo en invierno el suelo no puede estar demasiado mojado.
El color malva combina muy bien con los tonos pastel de los rosales.
El Espliego espanta los pulgones. No obstante la gran necesidad de abono de los rosales no resulta nada ideal para el Espliego.
El Espliego da un efecto mediterráneo si está plantado al lado de otras plantas amantes de la sequía y del sol.
Sobre todo tiene extraordinaria belleza un jardín de macizos bordeados de Espliego, y plantados con la Lavatera con su desbordante floración.
La poda de verano se realiza cuando ha terminado la floración.
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